La dificultad que encontró el presidente Javier Milei con la Ley de Bases y la reforma fiscal en el Senado obligó al Gobierno a abrir una negociación sobre al menos dos puntos clave de los proyectos, con la intención de firmar dictamen esta semana, apurado por el informe iría a dar el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y por el Pacto de Mayo que hoy presiona más al oficialismo que a la oposición.
A pesar de que Milei avanza con la organización del evento previsto para el 25 de mayo independientemente de lo que ocurra en el Senado con la Ley de Bases y ante la realidad reconocida de que volverá modificada a la Cámara de Diputados, los alfiles del Presidente quieren solucionar el entuerto para llegar a esa fecha con el triunfo de un proyecto aprobado, aunque el trámite se prolongue.
En el Senado, fuentes del oficialismo deslizaron a iProfesional que «probablemente intenten firmar dictamen el martes, para poder sesionar el miércoles de la semana siguiente y dejarse algún margen para el jueves inclusive». De esta manera, el debate podría concluir antes del evento que encabezará Milei el sábado 25 de mayo en Córdoba.
Sin embargo, es una incógnita si lo lograrán. El ministro del Interior, Guillermo Francos, señaló que están evaluando cambios sobre el régimen de inversiones (RIGI) de la Ley Bases y la restitución del Impuesto a las Ganancias en el paquete fiscal y, aunque son dos temas centrales, los planteos de la oposición dialoguista son más amplios que eso.
Además provienen de un grupo de senadores que integran bloques distintos y se mueven por separado, aunque todos son clave para alcanzar la mayoría de 37 votos. Esto complejiza la negociación que abrió el Gobierno en el Senado, donde para colmo esperan para esta misma semana el primer informe de Posse en el recinto. La influencia que esto pueda tener en las gestiones que están en curso es materia de especulaciones.
Ley Bases: ¿cómo avanza la negociación que abrió Milei en el Senado?
La discusión en el plenario de comisiones del Senado se retomará el lunes a las 15:00. Se espera que Unión por la Patria lleve expositores para fundamentar su rechazo a la Ley de Bases y el paquete fiscal y no se descarta que asistan referentes de la CGT ese día o el martes, Pero el oficialismo no atenderá demasiado a lo que se diga allí porque los votos que pueden darle el triunfo están del otro lado.
El debate de la Ley Bases en las comisiones continúa esta semana y el oficialismo espera poder firmar el dictamen para ir al recinto la próxima
Ante el posible intento de firmar dictamen el martes, en algunos despachos de la oposición dialoguista son escépticos. Advierten que las jefaturas parlamentarias del oficialismo «no tienen poder de definición» y ven cierta lentitud por parte del Gobierno para destrabar los proyectos, según comentaron a este medio.
No obstante, los libertarios lo intentarán y son más optimistas sobre un posible acuerdo. «Le van a dar bola a los pedidos de (Martín) Lousteau, (Guadalupe) Tagliaferri y otros sobre blanqueo y RIGI, más lo de Ganancias», sugirieron a iProfesional cerca del oficialismo.
Y es que además del radical y la legisladora del PRO, otros como Edgardo Kueider y Carlos «Camau» Espínola también cuestionan el régimen de inversiones. Por ello Francos reconoció que es uno de los puntos en los que habrá cambios. El detalle es que todos estos senadores tienen la firma que le permitiría al oficialismo sacar el dictamen de las comisiones para ir al recinto, además de los votos para la aprobación con cambios consensuados y no impuestos.
¿Qué cambios se evalúan sobre la Ley Bases y la reforma fiscal?
Las críticas al RIGI, que prevé beneficios impositivos y aduaneros para inversiones de u$s200 millones en adelante, apuntan a que anularía normativas provinciales que limiten esos beneficios (en contra de la autonomía de los distritos) y a que en muchos rubros, excepto minería e hidrocarburos, advierten que sus fábricas dejarán de ser competitivas ante potenciales inversores extranjeros.
Los senadores que cuestionan este régimen esperan que el Gobierno acerque en estos días una propuesta para modificar los «problema graves» que, a su criterio, tiene el RIGI. «Lo que se vio en las comisiones es que el planteo era consistente y los funcionarios no rechazaron las objeciones y propuestas», señalaron a iProfesional cerca de uno de ellos y agregaron: «Hay que ver cómo sigue y esperar a que siga funcionando la comisión».
No obstante, Francos aclaró que para el Gobierno lo que hay es un problema de interpretación de este capítulo de la Ley Bases, por lo que están dispuestos a ajustar su redacción, mientras que para la oposición dialoguista el problema es el contenido.
El Gobierno negocia modificaciones para asegurarse los 37 votos que necesitará para controlar la sesión y avanzar con la aprobación
En cuanto a Ganancias, un punto que tiene el rechazo de todos los senadores patagónicos y otros como Kueider y Espínola, el Gobierno evalúa proponer que se contemple esa región como «zona desfavorable» para excluir del tributo a los trabajadores de esas provincias, que serían los más afectados por los altos salarios que se pagan allí en el rubro energético.
Por su parte, Lousteau también reclamó cambios al blanqueo de capitales incluido en el paquete fiscal: que la tasa de ingreso sea más alta (de acuerdo al proyecto sería entre 0 y 5 por ciento), que los ex funcionarios puedan entrar cuando tengan más de 10 años de haber estado en el cargo (hoy serían cinco) y prohibir que el que blanqueó con anterioridad pueda volver a hacerlo, entre otros.
El «boomerang» del Pacto de Mayo: ¿qué tiene que ver con la negociación del Senado?
En ese grupo de senadores que plantean cambios a los proyectos dicen que por ahora no tienen interlocutores claros para la negociación, a diferencia de lo que ocurrió en Diputados. Los contactos con el oficialismo se limitan por ahora al plenario de comisiones. Por ello, algunos redactan sus propuestas en soledad para llevarlas directamente a ese ámbito y «ahí se verá qué pasa», comentan.
Observan que la presidenta del Senado, Victoria Villarruel, y los referentes del bloque libertario como Ezequiel Atauche y Bartolomé Abdala, están atados de manos en la negociación y que cualquier acuerdo depende del Ejecutivo, a la vez que entienden que el tiempo presiona más al oficialismo que a ellos.
El Pacto de Mayo se volvió un boomerang para el gobierno de Milei, porque después de haber puesto la aprobación de la Ley de Bases como condición para la firma de ese gran acuerdo con gobernadores y referentes políticos, los senadores acabaron usando la fecha elegida por el Presidente como una herramienta más de presión para retocar el proyecto antes de votarlo.
Durante las primeras jornadas de debate en las comisiones, hasta los más cercanos al oficialismo como Juan Carlos Romero mostraron que no tienen inconvenientes en seguir con el debate «martes, miércoles, jueves, cuando sea», lo que achicaría las chances del Gobierno de poder sesionar antes del 25 de mayo. En los pasillos del Senado, algunos arriesgan que la sesión incluso podría demorarse hasta después de esa fecha.
Llegar al Pacto de Mayo con un triunfo para Milei sigue siendo la meta de sus funcionarios y los senadores juegan con el tiempo
Si bien el Gobierno ya confirmó que el evento se hará con o sin Ley de Bases aprobada, los senadores que tienen la llave para el dictamen y el quórum (sobre todo los que no tienen arriba gobernadores que la Rosada pueda recompensar por su voto) juegan con el deseo de los alfiles políticos de Milei, como Francos, Karina Milei, Santiago Caputo y los jefes parlamentarios de La Libertad Avanza, de llegar a esa fecha con el proyecto aprobado aunque sea con cambios.
¿Irá Posse a dar su informe al Senado?
Es por esto que Villarruel bajó la orden a los suyos de «no hablar más de fechas», para que cualquier cambios de planes no se lea como una derrota del oficialismo, mientras los senadores «dialoguistas» ponen los reclamos sobre la mesa y esperan a ver qué hace el Gobierno en estos días.
La expectativa en el bloque de La Libertad Avanza por firmar el dictamen esta semana también tiene que ver con la visita de Posse prevista para el miércoles, cuando dará su primer informe de gestión como jefe de Gabinete, y con la intención de que esto no interfiera en las gestiones por la Ley de Bases de ningún modo.
Algunos senadores especulan que esa cita tendrá que reprogramarse, pero fuentes de la Jefatura de Gabinete, de la presidencia del Senado y de la oficina de enlace con el Ejecutivo que encabeza Omar de Marchi aseguraron a iProfesional que por ahora «sigue en pie».
La cuestión es que si la negociación por el dictamen de la Ley Bases siguiera trabada, Posse podría encontrarse con preguntas y planteos de los senadores sobre el tema que lo pongan en una situación incómoda y arriesgue las gestiones en curso.
El jefe de Gabinete es uno de los funcionarios de Milei con más bajo perfil, al punto de que muchos de los legisladores (y más el público general) no le conocen la voz y esta será la primera vez que cumplirá con la obligación constitucional de ir a Congreso una vez por mes a brindar el informe sobre la marcha del gobierno. En ese marco, un traspié en el medio de una negociación tan compleja no es imposible.
Con esa visita pautada, el gobierno de Javier Milei intentará moverse lo más rápido posible esta semana para avanzar con el dictamen de la Ley de Bases y mantener viva la esperanza de tenerlo aprobado antes del Pacto de Mayo, mientras se guarda la carta de anular en la Cámara de Diputados algunos de los cambios que haga el Senado.
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