Al comienzo Gadea, directora de la consultora Heartbeat, definió a la elección como competitiva. “Pareciera muy favorable a la oposición o más favorable a la oposición. Si miramos, por ejemplo, la tasa de actividad o tanto el nivel de empleo como el salario real, podemos decir que estamos en niveles prepandémicos. Esa carta cae a favor del oficialismo. Pero eso cambia cuando pensamos en la distribución del ingreso, cuando vemos que, por ejemplo, la recuperación del empleo está marcada en un quintil en particular, el quintil 5 es el que tiene mejor desempeño en recuperación del empleo, en detrimento de los quintiles 1 y 2”, argumentó.
A su turno Garcé, investigador del departamento de ciencia política de la FCS Udelar, analizó que en esta elección hay un consenso sobre que “se ha vuelto extraordinariamente difícil saber de qué lado va a terminar cayendo la moneda”. “Los niveles de incertidumbre siguen siendo altísimos. Un rasgo adicional en esta campaña electoral es que cuando uno empieza a mirar cómo están jugando los candidatos, en algunos momentos parece claro que algún partido acierta, en otros momentos ese partido que acertó se equivoca”, señaló.
Garcé definió la situación con una anécdota. “Hace tres meses atrás, si a mí me preguntaban cómo veía la elección, en alguna charla he dicho que apostaba un cuarto de hamburguesa a la reelección del gobierno. Después de la primaria, después de lo bien parado que salió el candidato del Frente Amplio, de la capacidad de movilización que tuvo, de lo rápido y bien que armó la fórmula y de lo sorpresivo de lo que hizo el partido nacional, si hubiera que apostar un cuarto de hamburguesa, capaz que habría que apostárselo al Frente Amplio”, explicó.
“Es una elección con alto nivel de incertidumbre como nunca, en la que los episodios de la campaña electoral también van haciendo que se muevan las pequeñas o grandes movidas, los pequeños y grandes aciertos de los partidos pasan a tener una importancia extraordinaria”, continuó en su análisis.
El docente de la FCS no escatimó criticas a los planteos de los partidos políticos. “Precisamos que los partidos abriguen, que no digan generalidades, que digan cómo van a encarar el problema de la educación, que es el problema más dramático del país, que digan cómo van a resolver el problema de la seguridad”, analizó Garcé.
Finalmente el director de Equipos, Ignacio Zuasnabar, posicionó su análisis como un escenario de “equilibrio entre bloques”. “Hubo una especie de elección de medio término con el referéndum de la LUC. Hay algunos elementos del clima de opinión que más o menos nos hablan de perspectivas de continuidad. La evaluación del gobierno es razonablemente buena. Pero cuando miramos la intención de voto, es más favorable a Frente Amplio que a la coalición”, dijo.
El politólogo agregó que “alguna regla se va a romper este año”. “Nunca hemos tenido un oficialismo que pierda una elección por un presidente con más del 40% de votación, nunca hemos tenido el Frente Amplio perdiendo una elección si llega a mitad de año con más del 40% de votación. Hoy tenemos más del 40% de votación en el gobierno, y tenemos al Frente Amplio con más del 40% de votación. Es inevitable, una de estas dos cosas”, concluyó.
En el publico que se convocó en el exclusivo Piso 40 del World Trade Center (WTC), además de analistas y profesionales de la ciencia política, se hicieron presentes dirigentes políticos y legisladores del oficialismo.
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