La reducción del Impuesto PAÍS del 17,5% al 7,5%, el mismo porcentaje que recibió la actual administración previo a anunciar un incremento de urgencia, está a semanas de aplicarse. Con esta baja de diez puntos, el Gobierno busca alivianar la presión sobre las importaciones, abaratando los costes, lo que, en consecuencia, impactará en la baja del producto final.
Cabe recordar que, la mitad de la cifra que las arcas del Estado dejarán de recibir con PAÍS, las percibirá con la reimplementación de Ganancias. De hecho, la baja del PAIS fue la contraprestación con la el Ejecutivo logró obtener la aprobación del Paquete Fiscal en el Congreso.
Con el tipo de cambio para importaciones bajando de $1.100 a $1.000, se espera un alivio significativo en los costos de producción, particularmente para aquellos sectores que dependen de insumos importados. Lo más impactante, de acuerdo a los especialistas, es que la disminución del valor de las importaciones podría significar un incremento de u$s1.000 millones mensuales en compras externas.
Y, lo más relevante para este Gobierno, es que la posibilidad de eliminar el impuesto parece estar cada vez más cerca. El ministro Luis Caputo afirma que aspira a eliminar de forma total esta carga impositiva, aunque el Impuesto PAÍS es uno de los pocos tributos que logra incrementar su recaudación pese a la caída de la actividad y con los reducidos recursos de las cuentas públicas.
¿Impactará la baja del Impuesto PAIS en la inflación?
También, al abaratar los costos de los insumos importados, se generará un impacto positivo en la industria nacional. Incluso, este avance podría acelerar el proceso de desinflación, llevando la inflación mensual a niveles cercanos al 3% y, en el mejor de los casos, reduciendo la inflación núcleo a un 2%, un valor más alineado con el ajuste mensual del dólar oficial, lo que podrá corroborarse en la medición de octubre.
Aunque, desde el área de Economía no ligan esta posibilidad a la baja del Impuesto PAÍS, sino al total de las implementaciones que está llevando adelante esta gestión. Pese a que no se espera un derrumbe abrupto de la misma, la estrategia del Gobierno busca estabilizar los precios y reducir las presiones impositivas.
Baja del Impuesto PAIS: balance entre el dólar oficial y el blue
Teniendo en cuenta el mercado cambiario estadounidense con el peso argentino tiene variaciones de más de $500, el exministro de Economía, Domingo Cavallo, opinó que la baja del Impuesto PAÍS lograría ajustar el valor del dólar oficial y, así, compensar la brecha con el libre y turista.
Es decir, que el análisis del economista apunta a un balance de valores de la divisa norteamericana, pero descarta una baja de los índices de inflación dado que los valores de las importaciones se mantendrían constantes. Si las medidas impactan como el Gobierno espera, el mercado podría comenzar a palpar una posible salida del cepo cambiario, una de las grandes problemáticas de los últimos jefes de Estado.
Algunas complicaciones con la baja del Impuesto PAIS
Pese a los dos posibles beneficios que se desprenden de esta baja, existen riesgos significativos, puntualmente, en las reservas del Banco Central. La reducción del tipo de cambio incentivará las importaciones, pero afectará negativamente al nivel de las reservas.
Esta situación pone a la actual administración en un dilema donde, mientras la desinflación podría acercar la posibilidad de levantar el cepo cambiario, una caída en las reservas podría complicar los esfuerzos por unificar el tipo de cambio hacia fin de año. Por lo tanto, la baja de diez puntos del Impuesto PAÍS representa casi una apuesta del Gobierno donde buscan impulsar la economía en un momento sensible a nivel nacional.
Si bien la modificación promete aliviar la inflación y mejorar las condiciones para la importación, el desafío de mantener el equilibrio en las reservas del Banco Central sigue siendo una preocupación latente. A medida que se implementen estas políticas, la economía enfrentará un delicado vaivén de equilibrios que determinará su rumbo en los próximos meses.
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