Los celulares tienden a caerse de los bolsillos, tropezar con objetos en una cartera o deslizarse de la mano del usuario, para terminar en el suelo y, con suerte, salir con algún rasguño o avería menor.
Las caídas de los celulares son una de las eventualidades más temidas por los usuarios. Durante los segundos que pasan mientras el celular está en el aire y hasta que se recoge del suelo y se comprueba que la situación no haya pasado a mayores, las pulsaciones se disparan en un abrir y cerrar de ojos.
Para respaldar esta afirmación con números concretos, durante 2023 más de 78 millones de personas en los Estados Unidos reportaron daños en sus celulares. La pantalla rota fue el tipo de daño más común, con el 67% de los casos.
Este tipo de daño es tan frecuente que las reparaciones de celulares gastaron alrededor de 8,3 mil millones de dólares en reparaciones de pantallas ese año, casi el triple de la cifra de 2018.
A pesar de los avances en la durabilidad de los celulares, las caídas siguen siendo una causa principal de roturas. El impacto genera costos considerables para los usuarios, quienes pagan en promedio 302 dólares por reparaciones, que también afecta la funcionalidad y la estética de los celulares. De hecho, aproximadamente el 38% de los usuarios opta por reemplazar su celular después de un daño significativo, mientras que el 32% decide seguir usándolo a pesar de los desperfectos.
Si bien existen varias soluciones paliativas a este problema, en esta nota de iProfesional se repasarán los diferentes tipos de fundas y carcasas que se encuentran en el mercado y que ayudan a extender la vida de los celulares más allá de las caídas repentinas.
Fundas de silicona para celulares
Genéricas o de alguna marca específica, las fundas de silicona tienen varias ventajas: son económicas, se consiguen en cualquier tienda del rubro y, además, vienen en diferentes colores, lo que le da una estética agradable a cualquier celular.
Además, estos productos proporcionan un buen agarre, lo que reduce las posibilidades de que el celular se resbale de las manos. Sin embargo, es importante asegurarse de que la funda esté bien ajustada al dispositivo para maximizar su efectividad en la protección contra daños, especialmente cuando las fundas son genéricas y compatibles con una gran variedad de modelos.
¿Cuál es la gran desventaja de esta alternativa que protege a los celulares de cualquier arañazo o raspón ocasional?: No son muy buenas absorbiendo golpes de una caída. Aunque mitigan un poco el impacto, no son la solución definitiva para resguardar al móvil de una caída desde una altura considerable.
Fundas resistentes a caídas
Entre las diferentes opciones que se encuentran en el mercado, hay fundas o «cases» que se venden con la leyenda «resistente a golpes y caídas». Muchas de ellas tienen algunas tecnologías que les permiten absorber los golpes para, de esta manera, reducir el impacto en el móvil.
Entre las más populares se encuentran las fundas tipo «rugged«, resistentes a golpes, que suelen estar hechas de una combinación de policarbonato (un plástico duro y duradero) y TPU (poliuretano termoplástico), que es más flexible.
Este diseño ofrece una protección superior contra caídas, golpes y arañazos. En la Argentina se consiguen varias marcas con esta tecnología, como Spigen o Walden, que tienen opciones para diferentes modelos de celulares.
Las fundas «rugged» están diseñadas para soportar condiciones extremas. Son ideales para personas que trabajan en ambientes difíciles o que suelen exponer sus dispositivos a caídas frecuentes. La desventaja de este tipo de funda es que suelen ser muy voluminosas, y modifican mucho el diseño del celular, además de agregarle peso.
Otro tipo de funda es la llamada «bumper«, que está diseñada principalmente para proteger los bordes y esquinas del dispositivo, que son las áreas más vulnerables durante una caída. Un golpe en ese sector del celular puede dejarlo inservible en un abrir y cerrar de ojos.
Usualmente, están hechas de materiales como el TPU, que absorbe bien los impactos. A diferencia de las rugged, las fundas bumper solo tienen material rígido en los laterales, dejando despejada la parte trasera con un toque acrílico, lo cual permite lucir el color original del celular, así como la marca de este.
Fundas para celular tipo bumper.
Fundas con protección militar
Si se busca ir un paso más allá, se puede optar por algunas de las fundas que tienen certificación militar. Estas fundas pasaron pruebas de resistencia basadas en estándares militares (como la certificación MIL-STD-810G). Esto significa que fueron probadas para resistir caídas de ciertas alturas repetidas veces, así como otras condiciones extremas, como vibraciones, humedad y temperaturas extremas.
Incluso, en algunos modelos, incorporan materiales avanzados como geles especiales o microburbujas de aire que absorben y dispersan el impacto, minimizando el daño al dispositivo. La contraparte de estos accesorios es que son pesados y voluminosos, pero adecuados para resguardar la inversión si se cuenta con un celular de alta gama, el cual llevó unos cuantos meses de ahorro para poder adquirirlo.
Cómo proteger los celulares plegables y con tapita
Desde hace algunos años, los celulares tipo «clamshell», con tapita y/o plegables, crecen en el mercado. En la Argentina, ofrecen este tipo de móviles Samsung y Motorola. Proteger un teléfono plegable se ha vuelto todo un desafío para los fabricantes de fundas y carcasas.
Carcasas para proteger un celular plegable de la línea Samsung Galaxy Z Fold.
Una opción viable es comprar las carcasas protectoras originales, porque se adaptan perfectamente a los celulares y no dejan ningún sector sin proteger. Si buscamos alternativas, se encuentran opciones genéricas y de marcas reconocidas que venden tapas para estos modelos.
En la mayoría de los casos, son dos accesorios: una tapa para el frente y otra para la parte trasera. Si se puede elegir, una buena opción es seleccionar una que, además del frente y las espaldas, proteja la bisagra del dispositivo, dado que es la parte central del funcionamiento de este tipo de teléfonos y un golpe fuerte en este sector puede determinar el fin de su vida útil.
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