Para el presidente Javier Milei la aprobación de la nueva revisión sobre el acuerdo con el FMI es un apoyo hacia su plan y, por lo tanto, también hacia la aprobación de su Ley de Bases en el Congreso, en momentos en que la llave para eso parece tenerla más que nunca la oposición dialoguista, donde por estas horas intentan coordinar entre ellos los nuevos cambios en el Senado y la vuelta a la Cámara de Diputados.
En el nuevo acuerdo que el Gobierno logró con el equipo técnico del FMI el organismo destacó que los resultados del programa de ajuste que ejecuta el ministro de Economía, Luis Caputo, son «mejores de lo esperado» y, si bien insistió en «mejorar la calidad y la equidad de la consolidación fiscal», le allanó el caminó a Milei para un desembolso de u$s800 millones.
Pero además, los comentarios elogiosos del equipo encabezado por Luis Cubeddu sobre el superávit fiscal y «la rápida caída de la inflación» implican un apoyo a los temas prioritarios de la agenda del Presidente que sirven al oficialismo para justificar la Ley de Bases, el paquete fiscal y el «mega DNU» que sigue vigente.
Sin embargo, la Ley de Bases y el proyecto de Medidas Fiscales están sujetas a las modificaciones y los tiempos del Senado -donde se especula incluso con que todo se demore para fines de mayo- para luego volver a la Cámara de Diputados y, en ese marco, la UCR y el bloque de Miguel Pichetto entablaron contactos para conversar sobre ese proceso, sin que el Gobierno tenga demasiado margen de maniobra porque estos sectores son clave para el quórum y la mayoría en ambas cámaras.
Milei y el FMI: ¿por qué el nuevo pronunciamiento implica un apoyo para la Ley de Bases?
Del comunicado que emitió el equipo del FMI se desprenden varios guiños que le sirven a Milei para la disputa política interna. Además de elogiar «el primer superávit fiscal trimestral en 16 años«, el «cambio de tendencia de las reservas» y la «fuerte reducción» del riesgo país, apuntala la necesidad de reformas para el sistema tributario.
Al mismo tiempo que insistió en mejorar la calidad y la equidad del ajuste fiscal el FMI remarcó que esto deberá ser acompañado por «reformas que mejoren la eficiencia y progresividad del sistema tributario». Esto significa, palabras más o menos, que el superávit debe consolidarse no solo con «motosierra», «licuadora» y postergación de pagos, sino también con recaudación.
Milei consiguió un empujón del FMI a su plan frente a la oposición, pero el debate de su Ley Bases se complica
En la Ley de Bases y el paquete fiscal hay capítulos que apuntan en esa dirección, como es, sin ir más lejos, la restitución del Impuesto a las Ganancias, que en las estimaciones del Gobierno tendría un impacto importante en la recaudación, según supo iProfesional. Sin embargo, es uno de los temas que más trabado está en el Senado.
El FMI también señaló «las reformas microeconómicas en curso» y habló de la necesidad de «atender los obstáculos a la productividad, la inversión privada y el empleo formal», misma línea discursiva que sigue el Gobierno y parte de la oposición dialoguista para defender el régimen de grandes inversiones (RIGI), otro de los puntos sobre los que habría cambios en el Senado.
En ese contexto,el oficialismo cuenta con un envión para llevar a buen puerto la negociación, aunque hoy el resultado dependa mucho más de la voluntad de la UCR y bloques provinciales en el Senado y de la bancada Hacemos Coalición Federal en Diputados, que no bloquean los proyectos de Milei pero sí condicionan su avance e intentan ahora actuar en conjunto para el tramo final del debate. Ambos tienen la llave para el quórum y la aprobación en las dos cámaras.
La UCR y el bloque de Pichetto conversan sobre los cambios: ¿qué puntos señalan?
La idea de estos sectores de la oposición es tratar de consensuar los cambios que podría introducir el Senado sobre la Ley de Bases y el paquete fiscal y allanarle así de antemano la aprobación final en esa cámara, que ya le había dado el primer visto bueno el 30 de abril, pero con los cambios que no habían podido hacer allí.
Según indicaron a iProfesional fuentes parlamentarias, los diputados Nicolás Massot y Oscar Agost Carreño mantuvieron conversaciones con los senadores Martín Lousteau y Maximiliano Abad de la UCR y Guadalupe Tagliaferri «sobre los cambios que había quedado truncos» durante el primer tratamiento en Diputados, es decir, los puntos que no pudieron acordar con el Gobierno e incoporar al texto.
Entre esas cuestiones están el RIGI y Ganancias, junto con el monotributo social. El bloque de Pichetto le planteó a los senadores que «si se trata de esos cambios, en principio acompañarían la versión revisada del Senado». Entre esas modificaciones, hablaron de la posibilidad de exceptuar de Ganancias a las provincias del sur, de acuerdo a lo indicado por las fuentes.
El bloque de Pichetto conversa con senadores de la UCR sobre los cambios y la vuelta a Diputados
En el RIGI los cambios que le pedirán al Gobierno tienen que ver con el proyecto amenaza con «avanzar sobre legislación provincial» y con el pedido para incorporar a las pymes, algo en lo que Hacemos Coalición Federal «insistió desde el día 1 y le dijeron que no hay plata», deslizaron en ese espacio ante una consulta de este medio.
También charlaron sobre los cambios que había pedido Itaí Hagman, de Unión por la Patria, para que no se caiga el monotributo social, sistema en el que figuran 1,2 millones de trabajadores de menores ingresos y por el que acceden a una formalización mínima con aportes jubilatorios y cobertura médica y que pasarían a la informalidad en un período de 90 días corto si se aprueba como está en el Senado.
¿La oposición toma el control del debate sobre Ley Bases?: la incómoda posición del Gobierno
Sin mayoría en ninguna de las dos cámaras, el oficialismo está obligado a negociar con los bloques de la oposición dialoguista que le permitan mantener al margen a la postura de rechazo total que expresa el kirchnerismo, sobre todo en el Senado, donde tienen 33 de las 72 bancas. En el Gobierno se resignaron a que el proyecto sufrirá cambios sí o sí y aspira ahora a consensuarlos con la oposición.
No obstante, en algunos despachos de la oposición dialoguista dicen que ven cierta «lentitud» por parte del oficialismo para cerrar los acuerdos y cumplir con su cometido de firmar el dictamen esta semana y llevar el proyecto al recinto para una aprobación en general aunque sea con modificaciones antes del «Pacto del 25 de Mayo» que impulsa Milei. Hoy está latente el riesgo de postergar una semana más el trámite en las comisiones, que se siguen reuniendo entre este lunes y martes.
En ese contexto, estos bloques aprovechan el hecho de ser los que tienen la llave del quórum y parecen haber tomado en sus manos la gestión para que los proyectos avancen en el Congreso con los cambios que ellos plantean, sin que el Gobierno tenga mucho margen para maniobrar frente a los reclamos que le llegan desde sectores.
Si bien la intención del ministro del Interior, Guillermo Francos, es destrabar los puntos más discutidos, entre ellos el RIGI y Ganancias, en el Senado los planteos llegan de un grupo heterogéneo que incluye a bloques provinciales chicos y esto complejiza la negociación porque varios de ellos se mueven de forma independiente y todos son clave para alcanzar la mayoría mínima de 37 votos y asegurar la firma del dictamen.
El Gobierno aceptará cambios a la Ley de Bases, con poco margen para maniobrar en el plazo que se propuso
Frente a esa situación, a través del vicejefe de Gabinete, José Rolandi, el Gobierno empezó a armar reuniones para las próximas horas con los distintos senadores que plantean cambios al paquete legislativo para tratar de encontrar un acuerdo y no quedar al margen de las conversaciones sobre el destino de los proyectos.
El debate continúa: ¿se demora más la aprobación?
El debate en las comisiones del Senado se retomó este lunes con la presencia del secretario general de la CGT, Héctor Daer, y su par de la CTA y diputado de Unión por la Patria, Hugo Yaski, entre una lista de más de 40 invitados que obligará a extender el tratamiento también durante este martes, con la posibilidad de continuar el jueves, según adelantó el libertario Bartolomé Abdala, que está al frente del plenario.
Esto complica los planes del Gobierno de tener dictamen esta semana y sesionar la próxima. Por estas horas no se descarta que esa hoja de ruta finalmente no se cumpla. No obstante, el oficialismo lo intentará. «Le van a dar bola a los pedidos de (Martín) Lousteau, (Guadalupe) Tagliaferri y otros sobre blanqueo y RIGI, más lo de Ganancias», sugirieron a iProfesional cerca de La Libertad Avanza.
Y es que además del radical y la legisladora del PRO, otros como Edgardo Kueider y Carlos «Camau» Espínola también cuestionan esos puntos, entre otros. Los cambios que haga el Senado luego pueden ser ratificados por la Cámara de Diputados o bien desestimados para insistir en la versión aprobada previamente, si reúne la misma mayoría.
Es en ese marco que los bloques más importantes de la oposición dialoguista en una y otra cámara conversar entre ellos sobre las modificaciones que podría tener la Ley de Bases, mientras el gobierno de Javier Milei se enfoca en los tiempos, aunque con poca capacidad por ahora para acelerar el debate y mucha dependencia de la oposición dialoguista, pese al apoyo simbólico o económico que pueda darle el FMI.
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